lunes, 4 de agosto de 2014

El estrés y la depresión pueden encoger el cerebro

Metales pesados que afectan nuestro organismo y cómo eliminarlos naturalmente


Metales pesados que afectan nuestro organismo y cómo eliminarlos naturalmente





Las toxinas en el cuerpo son todas aquellas sustancias que dañan nuestras células, entorpecen el desarrollo de funciones vitales y aceleran el envejecimiento.
Las toxinas del organismo se clasifican en orgánicas e inorgánicas. Las primeras se refieren a alcohol, medicamentos y drogas. Al dejar de fumar o dejar el alcohol u otras drogas, el cuerpo reanuda el proceso de eliminación de estas sustancias, y lo hace a través de la piel, los pulmones, la vejiga y el colon.
Se conocen como toxinas inorgánicas a la presencia de metales pesados en el cuerpo, que nuestro organismo no sabe eliminar. Éstos suelen saturar nuestro sistema linfático o acumularse en depósitos grasos o piedras de calcio en diferentes tejidos del organismo, sin que éste pueda eliminarlos de manera autónoma.
Cuando empezaron a aplicarse terapias por contaminación de metales pesado, principalmente plomo en las industrias armamentistas a mediados del siglo pasado, se descubrió que muchos de los pacientes no sólo perdían los síntomas conocidos por la sobreexposición al metal, también presentaban mejorías en otras áreas, como la visión, la capacidad auditiva y la movilidad. Estudios futuros permitieron descubrir los efectos nocivos de los metales pesados a largo plazo, y avanzar en la forma de combatirlos.

Los metales que más afectan a nuestro organismo.
Arsénico.
 Es considerado la sustancia más nociva para el organismo. Se encuentra en mayor o menor medida, en todas las fuentes de agua potable del planeta, como resultado de la contaminación del agua por los procesos industriales, su uso en pesticidas y la filtración natural.
Otras fuentes son las pinturas, veneno para ratas y producción de vidrio. El arsénico afecta la piel, causa problemas respiratorios, neurológicos y cardiovasculares. También está asociado con cáncer de pulmón, riñón, hígado, vejiga y piel.
Plomo.
 Se clasifica como la segunda mayor toxina para el cuerpo. Se le utilizó con frecuencia en tuberías y pinturas hasta mediados del siglo XX. También está presente en baterías, armas, PVC y pesticidas.
El plomo causa problemas en el desarrollo de los órganos del feto en mujeres embarazadas, daños al sistema nervioso central, riñones, sistema reproductor y en el tracto gastrointestinal. Es una causa de problemas de infertilidad y de abortos.

Mercurio.
 Las fuentes más comunes de contaminación por mercurio en las personas son las amalgamas dentales y el consumo de pescados y mariscos contaminados. Los peces más contaminados de consumo frecuente son el jurel, el tiburón, el pez espada, el blanquillo, el marlín y el atún.
Tristemente, el mercurio también es un ingrediente de algunas vacunas, como la de la influenza. Se le ha vinculado con autismo, Síndrome de Atención Dispersa y asma.

Cadmio.
 Es utilizado en fertilizantes agrícolas. De hecho, se estima que el 50 por ciento del cadmio en nuestro organismo proviene de estas emisiones.
Afecta a riñones, pulmones, hígado, huesos y cerebro. En altas dosis, provoca vómito, diarrea e irritación en estómago y pulmones. La exposición prolongada se ha asociado con cáncer de pulmón e hipertensión.

Aluminio.
 Es un contaminante presente en una amenazante cantidad de productos. Eliminar el contacto y la contaminación por aluminio se ha vuelto casi imposible en el mundo moderno. Se utiliza en la cocina, elaboración de cosméticos, está presente en el agua e incluso forma parte de aditivos de muchos alimentos
El aluminio está vinculado con Alzheimer, así como daños al sistema nervioso central, al sistema digestivo y a los riñones. Grupos activistas acumulan evidencia sobre la participación de la intoxicación por aluminio en el cáncer de mama.

Alimentos que ayudan a eliminar los metales pesados.

El ayuno como recurso terapéutico y la terapia de colon son excelentes alternativas para purificar el organismo de forma acelerada. El ayuno debe llevarse a cabo con control médico ya que puede tener consecuencias contraproducentes en la salud, debido a que estresa al organismo.

Existen, por otro lado, alimentos que ayudan al cuerpo a combatir gradualmente los efectos de los metales pesados, y su consumo no tiene efectos secundarios, sino que incluyen además múltiples beneficios para el cuerpo.

 Ajo.
 El ajo es un alimento con poderosas cualidades antibióticas y antivirales. También ayuda a eliminar los metales pesados. Inclúyelo en tu alimentación regularmente para evitar acumular contaminantes. Si los tienes, puedes incorporarlo a tu tratamiento, consumiendo entre uno y dos ajos todos los días en ayunas.

Cilantro.
  Esta planta mejora el sistema inmune y ayuda a eliminar el mercurio del cuerpo. Es una alternativa para las personas que tienen amalgamas o les fueron recientemente removidas. También se sabe que ayuda a expulsar aluminio y plomo.

Vegetales frescos.
 Existe una serie de vegetales con cualidades nutricionales y antioxidantes que ayudan a la desintoxicación. Lo hacen tanto actuando directamente sobre los metales pesados como purificando las vías de eliminación. Son particularmente benéficos el brócoli, el kale, la coliflor, la col y las coles de Bruselas.

Arroz integral, la Avena y los melocotones.
 Contienen Zinc y Selenio.

 Estos dos nutrientes juegan un papel importante en las mejoras del sistema inmune. También son parte importante de la dieta para los órganos sexuales masculinos, y se sabe que ayudan a la creación de enzimas antioxidantes que combaten los metales pesados en la sangre. 

 Cómo hemos visto, el cilantro es uno de los alimentos naturales que nos ayudan a eliminar metales pesados si es consumido regularmente. Una de las mejores, fáciles y deliciosas manera de ayudar a tu cuerpo a desintoxicarse de metales pesados usando el cilantro, es a través de jugos o batidos.

A continuación dos recetas de batidos que incluyen el cilantro entre una variedad de hierbas y jugos que harán de este batido más que saludable y productivo para su propósito.

Jugo 1
Ingredientes:
1 manojo de cilantro
2 tazas de piña
2 manzanas
1 limón (pelado, si no es orgánicos)
2 pepinos (pelados si no son orgánicos)
6 tallos de apio
1 diente de ajo
1 cabeza de lechuga romana
1 pequeño manojo de menta
3 tallos de acelga o col rizada/kale

Instrucciones:
Introducir la piña, manzanas, apio y limón a través de un extractor, luego licuar con el cilantro, menta, lechuga y acelga. Mezcla bien y sirve. Lo mejor es beber con el estómago vacío antes del desayuno. Tómalo a diario o intercalado con otros durante la semana. 

Jugo 2
Ingredientes:
2 peras orgánicas
1 manojo de cilantro orgánico
3 bananas orgánicas
3-4 Dátiles orgánicos
1 cucharadita de arcilla de bentolita 

Instrucciones:
Lava todos los ingredientes. Colocar en tu licuadora y licúa a alta velocidad hasta que esté suave y cremoso. Servir y disfrutar. Sirve dos porciones.

Nota: Para agregar terapia de quelación nutricional en estos dos batidos, agrega una cucharadita de Clorela. La clorela es una microalga unicelular y verde. Esta compuesta en un 60% de albúmina vegetal muy valiosa y contiene 19 aminoácidos, incluidos los 8 esenciales que deben ser ingeridos con la alimentación, ya que nuestro organismo no los puede producir por sí mismo. Además la Clorela es una fuente natural de sustancias minerales, elementos-traza y vitaminas, especialmente la vitamina B 12. Para que las sustancias que se encuentran en esta alga lleguen al organismo, las paredes de las células se abren cuidadosamente en éste y posibilitan de este modo una mejor asimilación de las muchas y valiosas sustancias.

 Lo que hace tan especial esta alga de agua dulce procedente de Asia es su alto contenido en clorofila. La clorofila posee la cualidad de atraer hacia sí los metales pesados y otras sustancias perjudiciales en el cuerpo y eliminarlas después.

Ya venden Clorofila liquida si no encuentras esta, toma 1 litro de agua con clorofila diario y esto ayudara de igual manera.